El tiempo. Mi tiempo. Tu tiempo.

El tiempo transcurre, es lo único que no podemos recuperar. Valorarlo es de sabios, respetar el tiempo de los demás, un deber. Entender que cada quien vive su tiempo es un regalo para aquellos que amamos. En estos últimos años, he aprendido, como muchos, a cuidar cada segundo, a no desperdiciar las horas, pero sobre todo a entender las prisas de algunos por lograr sus sueños. Somos egoístas al pretender que otra persona viva nuestro tiempo, el tiempo de cada quien es parte de su conciencia y evolución de su alma, de sus necesidades, que no siempre son las nuestras. Vivo mi tiempo, no el de los demás. Quiero cumplir mis sueños, no el de los demás. En armonía y con respeto a los que me rodean, trato de seguir los deseos de mi corazón, porque es mi tiempo, todo ocurre cuando tiene que ocurrir, y en la gracia de descubrir esta verdad encontraremos paz. Elizabeth Polanco. Añade fotos desde tu dispositivo móvil. No se puede combinar con lo que ya has añadido a la publicación.